EL JUEGO CON CUIDADOPublicada el 13 de Julio del 2012
A nadie se le escapa a estas alturas que el juego, y mas concretamente el juego online es una de las actividades que más ha crecido en los últimos años. Aún la crisis atacando sin remisión a la gran mayoría de las actividades económicas, todo lo que se relaciona con el juego online y en particular, las páginas web que contienen casinos online parecen no verse en absoluto involucradas o resentidas por las penurias económicas.
Sin embargo, como en muchas otras modalidades de juego, es importante saber controlar la adrenalina y el vicio para no caer en una adicción. Los gobiernos, para evitar esto y también para tratar que empresarios se lucren de la buena voluntad de los demás, están creando una serie de leyes y normativas para establecer una regularización más restrictiva de este tipo de juegos. El principal problema es que en muchas ocasiones
el juego online es fuerte, incluso para la ley
Para controlar la adicción, de saber cuándo hay que parar, es muy importante la ayuda de las personas que están alrededor. Éstos deben estar atentos y llamar la atención del jugador antes de que sea demasiado tarde. Hay una serie de preguntas clásicas cuyas respuestas pueden dejar claro si lo tuyo es adicción o simple afición (muy fuerte en algunos casos). Unos interrogantes que, si tú no eres capaz de hacerte o responderte, tus más allegados deben ser los que den el paso.
Cuestiones como si cuando terminas de jugar habitualmente has gastado más dinero del que tenías en mente antes de empezar, también si no te das cuenta del tiempo que pasas delante del monitor del ordenador o de la pantalla del dispositivo móvil y, al final, le dedicas mucho más tiempo del previsto debido a la perdida de la noción del tiempo, o si cuando vas ganando, cuando estás en racha, no eres capaz de parar y sigues buscando más beneficios sin tener un límite.
Señales y preguntas que pueden dejar claramente si realmente te estás convirtiendo en un adicto al juego, si eres un aficionado o si ya eres un adicto. Todo esto, además, en un mundo en el que, a pesar de que los todopoderosos gobiernos están poniéndose manos a la obra, se contradice mucho que el juego este creciendo en los últimos años. La pregunta que realmente hacen tanto los gobiernos como las empresas es
¿cómo lucrarse a costa de los problema de adicción?